La antigua Catedral de San Lorenzo, reconstruida a finales del siglo XI, guarda las cenizas de San Juan Bautista, protector de la ciudad, en la capilla homónima, obra cumbre de la escultura renacentista genovesa. El interior de la iglesia refleja el entramado político y religioso de la historia de la ciudad. Dentro de la Catedral se encuentra el Museo del Tesoro que expone otras importantes reliquias y piezas de alto valor artìstico e histórico. También hay que visitar el Museo Diocesano, donde se pueden admirar el claustro de los Canónigos y la Pasión de Jesús pintada sobre unas telas del material que se considera el antepasado del blue jeans (el cual significa “azul de Génova”). La ciudad posee muchas iglesias de gran valor artístico que varían del estilo románico y gótico al estilo barroco; la mayoría de ellas se encuentra en el casco antiguo: San Siro, la Iglesia de Jesús, Santa Maria di Castello, San Giovanni di Pré.